ORIENTADORES Y TECHO DE CRISTAL Por el cabezazo, como método de aprendizaje

 

 

1. Nada de esto es necesario en un Estado de Derecho

¡Claro! ¡Vives en el mundo perfecto que necesitas! Que necesitas, no sólo tú, sino toda la sociedad. Se llama Estado de Derecho. Un lugar, donde lo ilegal se denuncia, se persigue y se castiga. Un entramado de leyes, en el que la injusticia simplemente no está prevista. ¡Y se combate, amiguitos! Nos hemos constituido en sociedad perfecta y amante defensora de la evolución humana, a partir del principio de Igualdad y con la ayuda del imperio de la Ley.

¡Porque nuestras leyes defienden que ninguna persona puede ser discriminada por ningún concepto! ¿Verdad que sí?

Las acciones positivas hacia minorías supuestamente desprivilegiadas son, por lo tanto, innecesarias, en un Estado de Derecho.

Por ello, proclamamos que resulta muy lícito enumerar los siguientes siete principios:

1. La dirección de las empresas deberá eludir expresamente cualquier tipo de gestión ética y de compensación para alcanzar la igualdad de oportunidades para mujeres y hombres. La Igualdad está protegida por las leyes.

2. En nuestra sociedad, nunca se diseñarán ni pondrán en práctica políticas de responsabilidad social con perspectiva de género, de la misma manera que tampoco es necesario fomentar el uso de los pulmones para vivir o el respeto a la propiedad privada. La igualdad para mujeres y hombres está protegida por las leyes.

3. Eludiremos, por estúpidamente innecesaria, la vigilancia de la correcta aplicación de los criterios de igualdad para mujeres y hombres en la valoración de los puestos de trabajo. En nuestro Estado de Derecho, eso está protegido por la ley y, cuando se incumple, debe denunciarse.

4. Bajo ningún concepto, se realizarán promociones especiales para el acceso de las mujeres a los puestos de responsabilidad en los centros de trabajo. En un Estado de Derecho, eso margina a algunos hombres que podrían hacer una excelente labor.

5. El acoso sexual va contra la ley, así que se dilucida en los tribunales. Son innecesarias las medidas de prevención en la empresa.

6. La conciliación de la vida personal y la vida laboral no debe aplicarse, porque no conduce a nada.

7. El lenguaje es un sistema de comunicación. Lo que importa es decir las cosas claras. Queda prohibida toda pérdida de tiempo destinada a la elaboración de textos en lenguaje no sexista.

 

¡A trabajar todo el mundo!

Si la lectura de este manifiesto imaginario le provoca repugnancia y horror, en un grado superior a la tolerancia de su estómago, es porque usted sí sabe qué significa Estado de Derecho. Si le provoca indiferencia, es porque usted ha entendido el sarcasmo con el que se ha redactado, pero no ha avanzado con la Historia y tampoco comprende por qué se ha utilizado este sarcasmo. Si está de acuerdo o, simplemente, le parece que se ajusta a la lógica, hágaselo mirar, por favor: que entre usted en la marginalidad social es sólo una mera cuestión de tiempo.

 

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